domingo, 30 de septiembre de 2012

La metáfora del Grizzly, un juego de comparaciones germano-hispanas



El cielo se despeja, pero hay nubes. Débiles, dejan ver un cielo de azul muerto que hay allá arriba. El olor del café llena la cocina, parte del salón, se extiende hasta el patio. Un ruido atronador empieza a sonar, a llenar el aire, a tocar la piel, a colmar el cielo... Se hace cada vez más pesado... Salgo al patio y miro ese azul. Un mastodonte que hace retumbar los cristales cruza el pequeño trozo de cielo que aborda mi patio: majestuoso, intimidante, tristemente bélico... Airbus 400M, apodado Grizzly por su descomunal tamaño. 

En mi visita a Rusia de este verano he podido comprobar, entre otras cosas, dos máximas que el país ex-soviético repite como mantras: la excelencia de la industria alemana es de lo poco que mantiene en pie a la vieja y desvencijada Europa; España, el Sur, vive del cuento, no tiene capacidad industrial o empresarial y es una verdadera lacra para esa luz de la Unión Europea que es Alemania. Es la máxima vendida desde hace unos cuántos años en suelo ruso, con sectores enteros en manos de empresas alemanas: nada es en valde.

A mi, y a vosotros, todo esto nos suena, porque ya lo vivimos en España durante los años 80: entonces éramos un mercado abierto para las empresas alemanas y los sufridos españoles los mejores hermanos trabajadores del Sur. Cierto orgullo estúpidamente patrio me asolaba al comprobar el reduccionismo y la germanofilia (completamente interesada, como es lógico) con que hombres de negocios, jóvenes ejecutivos y profesionales liberales rusos, repetían esos mismos mantras tan cacareados por determinada clase política alemana.  

Respondí con varios ejemplos plenamente industriales sobre esa confusa y mezquina realidad, siendo mi teoría que, si bien todo eso era cierto en parte (y con mil reparos), también era cierto que España ha pagado numerosos, cuantiosos y a la larga, nefastos peajes, para que, a través de nuestra entrada en la UE, la economía alemana y en especial su industria, siga siendo competitiva o, al menos, rentable. Ya no somos de su interés, porque nuestro mercado ya está suficientemente explotado y, de camino, se han convertido en esenciales en varios sectores. Así que prefieren gastar su dinero en otros más hermosos e inexplotados mercados.

Como sabéis el Airbus 400M se ensambla en el tercermundista Sur, Sevilla, y contiene algunas piezas que han sido desarrolladas por la desastrosa industria española (Alestis es el gran consorcio vasco-andaluz-madrileño que se encarga de ello); en 2006 se presentó el proyecto del avión; en 2008 ensamblamos en fecha y forma el avión; empezaron las pruebas de vuelo... pero pequeños fallos en los motores han trasladado a principios de 2013 la entrega de las primeras unidades. Algunos años de retraso. 

La primera opción para cubrir los motores, unos de los más grandes de hélice construídos desde la II Guerra Mundial, eran los Pratt & Whitney de Canada, que en norteamérica se siguen construyendo y que por costes de fabricación y motivos técnicos, eran la elección más inteligente. Los rusos también han seguido haciendo motores de hélice tan grandes... que funcionan.

La gran presión política de Alemania en el seno de la Unión Europea hizo que finalmente fuera el grupo Europrop International Gmbh, con sede en Munich, fundado en 2002 y formado por capital básicamente alemán, inglés (Rolls-Royce) y francés, el concesionario que se encargara de desarrollar unos nuevos motores. El proyecto está ligado íntimamente ligado a tecnología alemana e inglesa. 

El primer vuelo de pruebas se realizó en diciembre de 2009. Tres años después aún estamos realizando vuelos de prueba, como el de esta mañana. Estaban comprometidos 174 aviones a una decena de países, aunque Chile y Sudáfrica han cancelado sus pedidos por el retraso y el sobrecoste del avión. Alestis ha anunciado un ERE por la asfixia económica a la que está sometida en estos momentos. Afectará a entre 300 y 400 trabajadores altamente cualificados. Y la inducida decisión política de que fuera esa empresa la encargada de hacer los aviones ha terminado saliéndonos caro.

Todos conocemos la Alta Velocidad Española. Uno de los más ambiciosos, costosos e importantes proyectos de la nueva España democrática consistió en trazar una línea de Alta Velocidad entre Madrid y Sevilla, a finales de los años 80, en uno de los países más montañosos, vastos y abruptos de Europa. Talgo es una empresa emblemática española que tanto en aquellos momentos como aún en nuestros días, realiza máquinas de tren capacitadas para alcanzar altas velocidades: tiene concesiones en varios países de varios continentes para diseñar esas líneas y fabricar esos trenes. 

Todos entendieron en aquellos momentos que uno de los "peajes" españoles por su entrada en la UE consistió en que fuera Siemens la concesionaria dedicada a construir y mantener aquellos primeros trenes, bastante más caros que otras opciones posibles, entre ellas, los propios Talgo.

Para terminar. En 2006 España, Andalucía a la cabeza, era la potencia europea en cuanto a desarrollo de nuevos sistemas de energías renovables. No era una, sino varias las empresas que despuntaban y conseguían concesiones para realizar proyectos en Oriente Medio, Estados Unidos o África, relacionados con la energía solar o eólica. Hoy, la falta de actividad pública por los recortes, la falta de crédito privado y las escasas perspectivas de comercialización, han hecho que la mayoría de estas empresas estén bajo mínimos. Abengoa es la que aguanta con más brío. 

El segundo país que, dentro de Europa, más activo era en cuanto al desarrollo de esos sistemas era Alemania. ¿Sabéis quién copa ahora el ranking, los proyectos e incluso el propio accionarado de algunas empresas españolas? Sí.

Podríamos hablar también de los compromisos que como parte integrante de la Unión Europea hemos adquirido, inducidamente, con proveedores de crudo que, fundamentalmente, benefician a las relaciones bilaterales entre Alemania y esos terceros países ya que, la nunca suficientemente explotada veta suramericana, a los españoles nos sale más barata y además fortalece nuestros propios lazos políticos y económicos con esos terceros países, que en estos momentos nos hubieran venido tan bien. 

Así que el corsé no es tan sólo alemán. Así que la mesura debería asomarse a determinados discursos. Así que los que salen perdiendo de esta Unión del Capital no son tan sólo los pobreticos alemanes subvencionadores. Así que la propaganda, sobre todo si es negativa, mejor dejarla en el cajón, porque sólo vale para los tontos o interesados y aqui dejamos hace bastante tiempo de serlo.      

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Todo el mundo mirará atrás (I)



En la España de hoy, 25 de Septiembre de 2029, con una República Federal, social, laica e igualitaria, consolidada desde la Revolución Cívica de 2015, todos los que tenemos entre 30 y 55 años, decimos con orgullo que asistimos al "ruedo del Congreso" con el que el pueblo español empezó a movilizarse ante las decisiones de un Gobierno elegido democráticamente, pero que resolvía según imposiciones "extrademocráticas". Rescatamos una de las crónicas que desde medios extranjeros recogía aquellos momentos, demostrando que no todos construímos la España que hoy todos disfrutamos. 

"La Policía Fascional rodea a manifestantes en torno al Congreso. Los topos comienzan los enfrentamientos y aunque pretenden huir, los ciudadanos están cercados por tres kilómetros de vallas. El frente conservador compara a cientos de miles de ciudadanos manifestándose, porque han cercenado derechos fundamentales sin su consulta, con un golpista que asaltó, secuestró y, pistola en mano, quiso disolver las cortes. Es fácil fabricar y lanzar un cóctel molotov; pero nadie lo ha fabricado y nadie lo ha lanzado. Es difícil emprenderla a porrazos con gente que se manifiesta con las manos en alto. Pero la emprenden.

Los periodistas de la cadena nacional católica aplauden la buena y ejemplar actuación policial ante la intimidación de miles de manifestantes manifestándose. Avisan a los ciudadanos, amenazan, de lo peligroso que es cumplir sus derechos de concentración y manifestación y de las severas leyes que castigan con penas ejemplares las manifestaciones violentas. La Policía Fascional lo sabe; los topos lo saben.

Los periodistas de la cadena nacional católica, también, y a pesar de ser pública, ridiculizan a los diputados y representantes, minoritarios y pacíficos, del Frente de Izquierdas: soberanamente elegidos por millones de españoles. Los comentaristas asociados, 85% miembros del establishment mediático neoconservador, son los más explícitos y violentos con respecto a la actitud de los diputados de izquierdas: creen que el derecho a manifestarse es fundamental, salen del Congreso, se pierden entre la gente... La ira y el desprecio de esos comentarista se ciernen sobre esos diputados. 

Los diputados de los otros partidos, la Derecha Rancio Nacional, el Partido Social Liberal (con algunos diputados a favor de las movilizaciones), la Unión Poder y Disciplina, la Derecha Fiscal Catalana y la Derecha Católica Vasca, entre otros, se quedan en el Congreso empezando el ruedo mediático que, según las noticias, va variando desde meridianos apoyo y comprensión, hasta la justificación sin paliativos de la violencia policial contra los manifestantes: "se lo estaban buscando, es un golpe de Estado".